Se ha escogido como símbolo principal de Río Grande a la cotorra puertorriqueña, por razón de que es en este territorio y específicamente en El Yunque (y otros picos de la sierra de Luquillo), donde subsisten aún ejemplares de esta especie. La bandera reúne los colores que dan vida a esta re- gión. El verde representa el verdor de los campos monocromáticos; el azul representa al Río Espiritu Santo y alude al nombre del pueblo; y el blanco a las nubes y a la capa blanquecina (neblina) que viste la falda de El Yunque.
En campo de plata, dos cotorras puertorriqueñas (Amazona vitatta vitatta) al natural, afrontadas, acompañadas en punta de una faja ondeada azul y en abismo, una montaña sinople de tres picos, el medio mayor. El jefe de azul, con un libro abierto de plata, acompañado a cada lado de cinco bezantes de oro, puestos en aspa. Al timbre corona mural de oro de tres torres, mamposteada de sable y adjurada de sinople. Simbolismo:
El escudo reune los elementos autóctonos, históricos y geográficos de Río Grande. El centro ataca los tres picos de El Yunque y sobre éstos, dos cotorras puertorriqueñas; aves autóctonas que se albergan en esta región. La faja ondeada azul representa el Río Espíritu Santo, vía navegable de gran utilidad en el desarrollo turístico y comercial, cuyo nombre alude también al nombre del pueblo. Un libro abierto representa a la Escuela Pimentel y Castro, la primera escuela que en Puerto Rico se edificó mediante la aportación apareada de fondos por un municipio (el de Río Grande) y por el Gobierno Insular de la Isla. Uno de los grupos de cinco bezante (el bezante era una antigua moneda bizantina), representa los cinco mil pesos aportados por Río Grande y el otro grupo, los cinco mil pesos proporcionados por el Gobierno Insular de Puerto Rico para la construcción de la escuela. El libro también simboliza la importantísima participación que tuvieron el magisterio y el estudiantado de Río Grande, en las gestiones hechas para dotar a la municipalidad de un escudo de armas, gestiones debidas a la iniciativa del maestro e historiador local Don Edmundo Del Valle, quien dio al proyecto, que no pudo ver realizado en vida, toda su dedicación y entusiasmo. La corona mural es Insignia esencial de los escudos municipales.