Maricao





En campo de plata, una cabria de sinople, cargada de cinco bohíos de oro y acompañada de tres ramas floridas del árbol de Maricao, al natural. Rodeando el Escudo dos ramas de cafeto frutadas, al natural, y por timbre una corona mural de oro de tres torres, mazonada de sable y aclarada de sinople. Los poblados de nuestros indios están representados por sus características casas, los bohíos que hace pocos años constituyeron, también la habitación de los campesinos puertorriqueños. Los ornamentos exteriores del escudo no son específicos ni exclusivos de Maricao. Las ramas del cafeto aluden a la zona cafetalera del país, en el que se asienta el pueblo. La corona mural es distintivo heráldico de las ciudades, villas y pueblos, y se usa como timbre de los blasones municipales, para distinguir a estos de los escudos reales señoriales, episcopales y familiares.








La bandera de Maricao deriva sus colores, su diseño y su simbolismo del escudo municipal. Consiste de un paño verde, de las tres dimensiones usuales en las banderas municipales de Puerto Rico, atravesado a lo ancho de un extremo a otro, por una faja centellada amarilla de tres puntos.


Himno
Sobre las verdes alturas
de mi borinqueña tierra,
se levanta Maricao,
en medio de sus haciendas.

Coro:
La sombra del indio
vaga en la Floresta
porque Maricao,
se viste de fiesta.

Un sol benigno le alumbra
suave brisa le refresca;
y el alegre caserío,
viste sus galas de fiesta,

coro

Entre tocatas y juegos,
asiste el culto a la iglesia
y van y vienen la gente
olvidando sus tristezas.

coro

Pero al volver a la casa
cuando el hombre a solas piensa
del antiguo Maricao,
se oye un suspiro en la sierra.

coro




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